El Enoturismo es una excusa perfecta para una escapada de fin de semana. Si lo prácticas en la Ribera del Duero ya no es excusa, se convierte en devoción.
El cauce de este río ha sido el principal protagonista de vinos mundialmente reconocidos, y que han sido elaborados a raíz de un suelo y microclima únicos.
Vinos míticos avalados por muchas marcas, que han convertido al noble caldo en preciado tesoro, y cuya venta en muchos casos se regula por listas de espera.
Nuestra ruta recorrerá una buena parte de la llamada “Milla de oro del vino”. Una escapada para los sentidos en los que ver, oler, oír, sentir y sobre todo, saborear.
Abadía Retuerta
Testigo de la historia y un lugar de encuentro entre la tierra y la vid. Visitaremos su paisajístico entorno, el monasterio, sus viñedos y su historia. En vehículo todo terreno alcanzaremos los rincones más escondidos de la finca, para entre pausa y pausa, degustar un aperitivo campestre.
Sus vinos, son producidos a partir de la selección de las mejores uvas de sus pagos, con una decidida apuesta por los vinos de terroir. Cataremos dos de ellos en su espectacular bodega.
El lechazo de Castilla
Estrella gastronómica de Castilla, el asado de cordero se ha convertido en estas tierras motivo de peregrinación. Un producto tradicional y exquisito asado con maestría en hornos de adobe, alimentados a fuego lento con brasas de encina y sarmiento de las viñas.
La armonía del lechazo con los vinos de Ribera es merecedora de medalla.
Castillo de Peñafiel
Guardián altivo de los viñedos del Duero, se alza sobre una loma estrecha y larga, que le otorga su característica forma de un buque.
Declarada Monumento Nacional en 1917, en la actualidad es todo un emblema para el enoturismo de la Ribera del Duero.
Bodega Protos
Su nombre constata la iniciativa de un grupo de viticultores de la comarca que se aventuraron a crear la primera bodega de la Ribera del Duero.
En pleno corazón de la montaña que sustenta el Castillo, más de dos kilómetros de laberínticas galerías excavadas en la tierra, nos mostrarán el secreto que guardan sus barricas, y cómo han sabido preservar la clave del éxito de esta bodega.
Aranda de Duero
Durante la Edad Media, Aranda de Duero se convierte en uno de los más destacados productores de vino de España.
Situada en un cruce de caminos estratégico, se convierte en un punto clave de distribución de vino, y con ello debe de buscar una solución determinante al constante problema de almacenamiento y conservación de vino.
La construcción de bodegas subterráneas fue una solución ingeniosa a varios problemas como el espacio, la temperatura y la luz.
Bodega Prado Rey
Con una historia heredada desde 1503, Prado Rey se presenta en la finca del Real sitio de la Ventosilla, un enclave natural excepcional que presume de ser la mayor explotación vitivinícola de la Denominación de Origen Ribera del Duero.
Disfrutaremos de un juego sensorial de aromas y tacto, a la vez que catamos sus vinos y degustamos productos de elaboración propia.

